Revolutionary Road
La insatisfacción de tenerlo todo puede ser fatal. El anhelo de un cambio, el intento de huir de la perfección adquirida en pro de la búsqueda de uno mismo lleva a la locura de los sentimientos. Los no controlados, los enfrentados y los sufridos; esos que duelen de verdad cuando no estás solo y cada paso que das afecta a otra persona más.
Revolutionary Road refleja la historia de una pareja en la que la desesperación por encontrar algo aún mejor, el inconformismo, el amor y la cobardía condicionan toda una vida y tienen siempre consecuencias. Leonardo DiCaprio hace el papel de ese hombre casi perfecto, enamorado y servicial que todas querríamos tener y con una maravillosa interpretación nos convence del gran amor que profesa a su esposa (Kate Winslet). Ésta es la gran sufridora; la esposa, la madre y la mujer inconformista que ve cómo su ansiado cambio se escapa por muy poco y no está dispuesta a ello.
Los protagonistas consiguen una verdadera historia de dos, en la que caben pocos personajes más. Y con los llantos más intensos, los gritos más llamativos y los silencios más esclarecedores logran transmitirnos ese cúmulo de sentimientos encontrados y dudas que tan repetitivos son en esa búsqueda del amor y la vida perfecta. Eso que parece que todos perseguimos. Y de esta manera, la película funciona.
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